Cada persona es única, luego de ser creada se rompe el molde por lo tanto no hay personas iguales, considero en mi labor docente que los estudiantes sin importar su edad o categoría, son mi razón de ser, por lo que me animo a servirles mediante el respeto y dedicándoles mi calidad de tiempo, pues en fin el servicio es la razón humana, soy ponente fiel que he nacido para servir y al hacerlo soy feliz, la lúdica y la diversión son métodos que ayudan a que mis estudiantes al igual que yo lo sean.
Es adepto conocer que en la primaria se aprende los pasos básicos humanos, no solo las competencias de los regímenes educativos de no ser posible estos tratados se pierde la esencia de la enseñanza primaria, puesto que en la secundaria todo debe apuntar al pensamiento, un pensamiento inequívoco que en la universidad será el bastón para razonar a un único propósito: servir, pues cada persona será feliz en la medida que pueda servir a los demás, es necesario apuntar que para servir se debe tener una maestría en paciencia y un PhD en constancia.
Una accesoria apoyada con una lúdica pedagógica llega a ser mas importante que una clase, por ello es necesario crear canales de participación donde los estudiantes puedan llegar a ser tratados como hijos y los docentes de igual manera como padres, este vinculo en la mayoría de ocasiones se logra mediante el juego o las lúdicas, una clase puede llegar a estar plagada de buenos conocimientos pero si no se activa con el movimiento es muy difícil que el conocimiento se quede.
Aunque las condiciones docentes a nivel mundial hayan sido relegadas a los últimos escalafones sociales, es un deber de la educación promulgar la ética, para que los jóvenes puedan descubrir su papel en la sociedad, se debe enseñar a pensar y a trabajar en equipo desarrollando capacidades que en la propia persona despierte comportamientos ciudadanos, una sociedad divertida es una sociedad que conoce sus problemáticas y no se enfrasca en los problemas sino que busca la solución, por lo que es un menester hacer el llamado a todos los docentes, a hacer de sus aulas un espacio donde la diversión sea la primer asignatura a evaluar.
Puede que este post no llegue como una ayuda académica, pero me sentí obligado a escribirlo, he visto como mis compañeros de cátedra fruncen el seño cuando intentan ser amables, no pido que seamos super-humanos pero que en lo posible intentemos sacar sonrisas o mediante la lúdica y la recreación podamos ejercer terapias de enseñanza que mediante el marcador y el pizarrón resultan casi imposibles de comprender, dentro de poco les enseñaré mi situación y espero que me apoyen desde cualquier lugar del mundo con sus mensajes. Hasta pronto.